Aparece esta imagen rodeado de las murallas de Ávila y en el centro el árbol de la cruz con la figura de Cristo clavado de pies y manos; en estas presenta una innovación con respecto a las imágenes que acostumbramos a venerar: los clavos y los brazos no penetran la palma de las manos, sino que taladran el principio de la muñeca, siguiendo la teoría de que el taladro en la palma de la mano no podía soportar el peso de Jesús sin rasgarse, mientras que el inicio de la muñeca podía soportar perfectamente todo el peso del cuerpo, aún sin tener un sostén sobre el que apoyaran los pies.
La imagen del Santísimo Cristo de las Murallas fue realizada en el año 2000 por el escultor abulense, afincado en Sevilla, D. Nicomedes Díaz Piquero, siendo bendecido por el Sr. Obispo de la Diócesis, D. Adolfo González Montes, en la tarde de jueves Santo, saliendo por primera vez en procesión al día siguiente, presidiendo la solemne procesión oficial de viernes Santo, escoltado por miembros de la Policía Municipal con traje de gala y presidido por la Junta de Semana Santa de Ávila.
El Santísimo Cristo de las Murallas se encuentra al culto en la capilla central de la girola de la S.A.I. catedral de Ávila.